Acá entre nos
Alejandro Moguel
Capufe ya preparaba otro aumento
Caminos y Puentes Federales (Capufe) estaba listo para darle un nuevo golpe a los bolsillos de los automovilistas mexicanos, pero algo pasó de última hora que hizo echara reversa en esa decisión que ya había sido tomada.
Suspendió la mañana de este miércoles, hasta nuevo aviso, el ajuste de 7.36 por ciento en promedio. Esa tarifa iba a ser aplicada en todas las autopistas de México.
La dependencia precisó que esta suspensión en el ajuste tarifario obedeció a instrucciones giradas por la Secretaría de Infraestructura, Comunicaciones y Transportes (SICT) y no dio más detalles. El caso pudo haberse originado desde las altas esferas políticas del país, en razón a que el horno no está para bollos.
Hay muchas inconformidades en distintas partes de México, por los múltiples asesinatos realizados por ajustes de cuentas entre bandas del crimen organizado, los crímenes cada vez más frecuentes entre periodistas, la famosa Casa Gris del hijo del presidente López Obrador, que supone un conflicto de interés o algún delito de corrupción, y la intensa polarización que se ha dispersado con más fuerza cuando el mandatario nacional atacó en forma frontal a los periodistas Carlos Loret de Mola y Carmen Aristegui. Son muchos frentes de batalla abiertos desde Palacio Nacional, como para andar aumentando las tarifas de las carreteras de cuota.
En Chiapas, ya nos la habían aplicado desde mediados de enero pasado. Las casetas administradas por la empresa Concesionaria de Autopistas del Sureste S.A. de C.V. (CAS), perteneciente al grupo Aldesa, iniciaron la segunda semana de enero con un aumento en la cuota de peaje en alrededor de 10 pesos. Sin embargo, en la caseta que está en el municipio de Jiquipilas las cifras incomodaron.
El 16 de enero de 2021, la mencionada operadora incrementó 10 pesos el costo y pasó de 53 a 63 pesos. Un año después, sin justificación ni previo aviso, esa misma empresa aumentó de 63 a 75 pesos el peaje de la capital chiapaneca hacia San Cristóbal de las Casas, una carretera que está pésima porque la circulación vehicular fue reducida a dos carriles, como consecuencia de que hay brigadas presuntamente trabajando.
Para los usuarios, este costo es un golpe fuerte para la economía local y el ingreso de los chiapanecos. De igual forma, esos aumentos fueron vistos como una burla para los automovilistas y choferes chiapanecos porque es una vía que está en pésimo estado, y porque a cada rato hay accidentes viales por la irresponsabilidad de los directivos de las empresas constructoras quienes no han colocado una señalización vial adecuada para evitar siniestros.
El reciente martes, Caminos y Puentes Federales dio a conocer que a partir de este miércoles 16 de febrero las tarifas de peaje en las carreteras se incrementarían 7.36% en promedio. En el caso de la autopista México-Acapulco, Capufe detalló que había acordado un incremento adicional dentro del límite de 10%, luego de que se había aplazado el aumento de las cuotas en ese tramo.
En la autopista Cuernavaca-Acapulco se aplicaría una tarifa de 596 pesos para la circulación de autos, lo que significa un aumento de más del 13%, respecto al peaje vigente en 2021. En tanto las motos iban a pagar 297 pesos.
En un comunicado se detalló que el Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), a través del Fondo Nacional de Infraestructura (Fonadin), giró la instrucción a Capufe para realizar el ajuste de precios.
Capufe explicó que el aumento se debía a los efectos inflacionarios registrados en diciembre de 2020 y de 2021.
El incremento en las tarifas entraría en vigor a primera hora de este miércoles 16 de febrero, sin embargo, en forma repentina la instrucción fue cancelada.
El organismo detalló que los recursos que se recaudasen por el peaje de las autopistas integradas en la red concesionada serían destinados a cubrir los gastos de operación y conservación de esta infraestructura, algo que causa risa entre los usuarios de esas autopistas porque nunca han estado en condiciones óptimas para ser transitadas. Nunca se retribuye de manera proporcional el costo del peaje con el servicio que las empresas regresan a los usuarios.
Es más, la molestia ha crecido de manera exponencial, al grado de entrar en rebeldía, en algunos estados del centro del país, en donde algunos automovilistas y motociclistas se han atrevido a cruzar sin pagar.
Algunas de las motocicletas que cruzaban por la caseta de Las Américas, en el Estado de México, al ser vehículos pequeños, evaden muchas veces el “poncha llantas” y no pagan los 31 pesos de peaje.
REBELDÍA
El periódico El Universal documentó, a mediados del mes pasado, cómo en un lapso de una hora tres motocicletas esquivaron la pluma de la caseta y pasaron por un costado para no caer en el “poncha llantas”.
Cabe recordar que esta caseta cobra 62 pesos a los automóviles y las motocicletas deben pagar la mitad, es decir, 31 pesos.
Incluso unos tripulantes de una motocicleta, simularon una avería en su vehículo y se bajaron para empujarla, pero después de evadir el poncha llantas, unos metros adelante se subieron y se fueron por la autopista. Algunos automovilistas, incluso, rompían las plumas que la hacen de contención antes de pagar la cuota y después huían. Sin embargo, las empresas idearon colocar el famoso “poncha llantas”. Si los automovilistas rompen la pluma, ese mecanismo se activa en automático y saltan hacia arriba puntas filosas que ponchan los neumáticos y obligan a detener la unidad.
Pero, eso ha sido consecuencia de que las empresas que tienen concesionadas las autopistas son muy abusivas, cobran un peaje caro, suben sus tarifas a cada rato y nunca se preocupan por tener las vialidades en buen estado.
Email: alexmoguels@hotmail.com