Terminal de transporte foráneo en Tapachula provoca caos vial en Mercado San Juan 

Ramón García /CP 

La terminal de transporte foráneo de las empresas Soconusco y Chicharas, que se ubica en la zona de bodegas del mercado y Central de Abastos del San Juan es parte medular del grave problema vial y el caos que se genera diariamente en las calles que circundan esa plaza pública, las unidades de pasaje se apropian de parte del estacionamiento destinado a los clientes y carros de carga lo que provoca problemas con los comerciantes. 

Señalan que el lugar es inadecuado para una terminal de pasaje, por lo que los comerciantes del mercado de abasto exigen que sean reubicadas ante lo caótico de la situación que generan y el consecuente despojo de los espacios por parte de las empresas que son representadas por Jaime Pérez Velázquez, quien mantiene a los choferes armados con palos para amedrentar a los automovilistas y comerciantes que reclaman el uso de espacios públicos para beneficio de ese transporte. 

Señalan que es urgente sacar del lugar a esa terminal, por lo que piden a las autoridades locales y de transporte atender ese grave problema, toda vez que no hay condiciones para que siga funcionando en ese lugar, la única Central de Abastos de Tapachula y destinada al trasiego y comercio de frutas, verduras y mercadería. 

Los problemas que generan en la zona de mercado por ese transporte son cada vez más frecuentes, principalmente con los choferes que se han apropiado del estacionamiento ante supuestas influencias en el Ayuntamiento de Tapachula y el Gobierno del Estado, de parte de su representante Jaime Pérez Velázquez. 

La terminal ha quedado obsoleta ya que solo ocupa pequeños espacios que son utilizados como ascenso y descenso de pasajeros y sala de espera, sin embargo, ante esa reducción las unidades ocupan el estacionamiento mientras esperan turno para cargar, lo que impide el paso de los vehículos de los clientes y de las mercancías. 

El tránsito vehicular en las calles que circundan el mercado San Juan constituye un verdadero infierno, tanto para los conductores de vehículos, motocicletas y transeúntes y clientes de la central de abastos, la prepotencia y testarudez de los choferes de colectivos que siempre andan armados con palos en señal de amenaza contra los comerciantes. 

Muchos clientes del mercado se han alejado y buscan hacer sus compras en otros mercados o plazas comerciales, ante el problema del tránsito vehicular en la zona, la inseguridad y los problemas que se generan.